OCUPACIÓN Y DISTRIBUCIÓN:
La geometría del edificio se explica desde la generación de media pieza, que rotando sobre el punto medio del eje del solar, se vuelve sobre sí misma, dando lugar a “dos edificios en uno”, lo que simplifica y clarifica mucho la propuesta, desde el punto de vista funcional y estructural.
Esta división ayuda también a salvar el desnivel del solar. Se propone “dislocar” el edificio, creando dos cotas 0, una en la parte más elevada del solar y otra en la parte más baja.
La planta Baja se adapta al desnivel que existe entre las dos cotas 0, uniendo ambas por rampas que adquieren la propia pendiente natural del terreno.
El edificio (cada mitad) se organiza a partir de un núcleo central, donde se encuentra el núcleo de comunicaciones, y que distribuye de forma clara la disposición de las viviendas alrededor del mismo. Así mismo, se consigue economizar, no dotando al edificio de más infraestructura de la necesaria.
Este modo de organizar las viviendas alrededor del núcleo servidor, da a las viviendas la posibilidad de distribuirse en horizontal, alcanzando una mayor superficie de fachada, lo que implica más iluminación para la misma, evitando la vivienda tubo de 15m de crujía.
Se consiguen 104 viviendas, de las cuales, 2 son para personas de movilidad reducida, las cuales se sitúan en planta baja.
La vivienda pretende economizar, “empaquetando” los núcleos húmedos (Baño + Cocina + Tendedero), al mismo tiempo que separa, o filtra, las estancias “día-noche”.
En la mayoría de las viviendas, el dormitorio individual posee una puerta corredera que la une con la sala de estar, posibilitando la unión de ambas, ampliando así, la estancia de “día” y dotando al espacio de cierta flexibilidad.
FACHADA:
La diferencia de escalas entre los huecos de las diferentes estancias y su distribución, hacen que la fachada se acerque en apariencia a la “Alfombra de Sierpinski”, fórmula-representación matemática que busca reducir una superficie a cero, mientras su perímetro crece hasta el infinito, a través de una serie de sencillas operaciones de sustracción, de la misma manera se pretende perforar la fachada rozando los límites de su consistencia.
Se propone un edificio con una apariencia exterior compacta (ladrillo klinker negro) y fractal con dos tipos de aberturas. Una de pequeña escala, conformada por las aberturas a dormitorios y baños y otra abertura de mayor escala, que perfora y atraviesa la vivienda y que se corresponde con las salas de estar.
A modo de protección solar y de las vistas, se proponen unas lamas metálicas y lacadas en azul, fijas en los tendederos y móviles en sala de estar, éstas últimas quedan embebidas en la propia fachada, no sobresaliendo de la misma.
